¿Sabes? No soy nada envidiable. No tengo un cuerpo que de envidia,ni una cara que de gusto ver,ni siquiera unos ojos bonitos,con las pestañas largas ni unos labios de anuncio de gloss. No tengo los dedos finos y bonitos,ni los brazos delgados como las actrices que se ponen esos guantes negros largos y les quedan perfectos. No tengo un pelo "pantene",ni si quiera el color es especial. No soy demasiado inteligente,ni ingeniosa,ni creativa. Ni siquiera puedo considerarme buena persona,no puedo decir que me llevo bien con todo el mundo y que me encanta hacer favores. Sigo haciendo cosas de críos,me sigue haciendo ilusión que me toquen dos tatuajes en una bolsa de patatas y me cuesta dormir el día antes de una excursión por los nervios. Y también hago cosas que todavía me queda tiempo para poder hacer. Cuando acierto,suele ser por pura suerte,y no puedo evitar que siempre se me escape el tiempo. Pero puedo decir que tengo gente que me apoya en todo lo que haga,aunque sea la idea más estúpida del mundo,y frente a las tormentas,me prestan su paraguas. Que me hace sentir especial,que cuando me dicen "guapa" me hacen sentir una modelo. Que aunque tenga las manos vacías,me llenan el corazón hasta que rebosa el límite y siento que va a explotar. Que aunque haya tenido un día de mierda,con un par de segundos de su voz,puedo sentirme la persona más afortunada del mundo y dormirme pensado que ha sido un día fantástico. Y que tengo la grandísima suerte de tener gente que me saca una sonrisa todos los días,que aunque no sea reluciente ni tenga ese brillantito que salta en las películas,es la más verdadera y agradecida que pueda haber.
A.
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